José Carlos Avendaño. La Jornada de Oriente. Con una inversión de 27 millones de pesos en un periodo de cuatro años, el pasado viernes reabrió sus puertas el Museo Regional del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en la ciudad de Tlaxcala, el cual sufrió una reestructuración integral en sus áreas.
Este espacio se asienta en lo que fue el claustro del ex convento de Nuestra Señora de la Asunción en la ciudad de Tlaxcala construido en el año 1536, el cual cuando dejaron de vivir los franciscanos se utilizó en algún momento como cárcel, cuartel y vecindad, hasta que el INAH lo tomó para sus actividades en 1980 y abrió sus puertas el Museo Regional en 1984.
El ex convento de Nuestra Señora de la Asunción fue el tercero que se construyó en la Nueva España, el primero fue el de la Ciudad de México y el segundo el de Texcoco, pero el de Tlaxcala es el único que queda en pie.
La inauguración de la rehabilitación del museo estuvo a cargo de la directora general del INAH, María Teresa Franco, quien estuvo acompañada del titular de la Secretaría de Educación Pública del estado de Tlaxcala, Tomás Munive Osorno y otros funcionarios.
En su intervención, Teresa Franco dijo que abrir el museo de manera completa después de una amplia reflexión interdisciplinaria y del trabajo de un grupo de especialistas que desarrolló las propuestas del contenido porque no se trató sólo de actualizar las colecciones, sino de comunicar su valor a la sociedad, es una noticia buena.
Destacó que el edificio monumental que alberga este museo brinda los elementos para comprender las particularidades de la región de Tlaxcala, pues el inmueble se construyó en la primera mitad del siglo XVI para la pedagogía franciscana, después sirvió como cuartel, penitenciaría y finalmente como un enclave cultural desde que fue considerado un monumento histórico en 1939.
El Museo Regional de Tlaxcala ofrecerá una exposición permanente titulada “Tlaxcala, tierra de encuentros”. Asimismo, exhibirá la muestra temporal “Trazos virreinales, patrimonio restaurado”, integrada por tres pinturas sobre tabla del siglo XVI.
Este nuevo discurso museográfico fue desarrollado por especialistas en historia, etnografía, antropología y arqueología del Centro INAH–Tlaxcala, quienes señalaron que un tema recurrente en la historia de la región es el intercambio cultural, de ahí que sea el hilo conductor del recorrido que abarca desde el paleolítico hasta el siglo XX.
El nuevo discurso museográfico está dividido en 12 temas: uno sobre la paleontología en el estado de Tlaxcala; cuatro sobre el periodo prehispánico; cinco abordan el virreinato, uno más el siglo XIX y otro la Revolución Mexicana.
En total se exhibirán 200 piezas, entre restos óseos paleontológicos, cerámica, escultura en piedra, cuchillos de obsidiana, caracoles, pinturas, esculturas, libros, muebles, documentos y fotografías. Además de objetos recientemente descubiertos, como los vestigios arqueológicos encontrados en Quimicho y algunas piezas de mayólica de los siglos XVI y XVII.
Con la renovación del Museo Regional de Tlaxcala los visitantes tendrán la oportunidad de interactuar con objetos lúdicos que propician la reflexión histórica y el vínculo con el presente. Además, hay recursos tecnológicos que permiten profundizar su conocimiento y enriquecer su experiencia interactiva del INAH.
Los trabajos iniciaron desde el año 2012 a fin de restaurar y adecuar los espacios arquitectónicos, que incluyó mantenimiento preventivo y correctivo en todas las salas para coadyuvar en el proceso de montaje de la exposición permanente.
Entre los trabajos que se efectuaron en el ex convento destaca la rehabilitación de la instalación hidráulica; revisión y reparación de los sistemas de electricidad; colocación de luminarias y sensores de movimiento, además de accesorios de baño para personas con discapacidad.
También se realizó el forjado del aerodren para el control de humedad, se amplió el andador peatonal en el patio norte, se rehabilitaron los pisos en la Sala Cacaxtla y de la biblioteca, se colocó una subestación eléctrica y se hicieron labores de carpintería y cantería, así como la instalación de un sistema de circuito cerrado de televisión y contra incendios en el edificio.
El inmueble que alberga el Museo Regional de Tlaxcala fue construido por mano indígena entre 1537 y 1542.
Por su parte, el delegado del Centro INAH–Tlaxcala, Emilio Velázquez Gallegos refirió que para realizar los trabajos de intervención previamente se elaboró un diagnóstico sobre el estado que guardaba el inmueble y se detectó un muy fuerte problema de resentimiento de la estructura provocado por la humedad en el subsuelo y las techumbres estaban en mal estado, lo cual “tenía muy comprometido el monumento histórico de la capital”.