Se buscará que tengan conciencia musical, dijo Massimo Quarta, conductor de la filarmónica
Será una forma de evaluar el estado de la dirección internacional, según Fernando Saint Martin
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El Premio Internacional de Orquesta Ofunam se convocará cada dos años. En las imágenes, Massimo Quarta (izquierda) y Fernando Saint Martin durante la entrevista con La JornadaFoto Marco Pelaéz
Mónica Mateos-Vega
Periódico La Jornada
El descubrimiento de talentos, así como el impulso a la formación artística de una nueva generación de músicos, son las metas que animan la creación del Premio Internacional de Orquesta Ofunam, concurso único en su tipo en el país, respaldado por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Desde el extinto Premio Internacional Eduardo Mata de Dirección de Orquesta, que durante ocho años auspició el programa Instrumenta Oaxaca y que concluyó en 2009, no se había dado una iniciativa de este tipo encaminada a marcar una pauta en cuanto al impulso a las trayectorias de jóvenes directores.
Con el ímpetu universitario, el certamen tendrá como orquesta residente a la Filarmónica de la UNAM (Ofunam), una de las más importantes de México.
Se busca, además, dar una dimensión académica a la dirección de orquesta a partir del concurso, dijo Juan Ayala, director de programación cultural de la máxima casa de estudios.
La convocatoria se lanzó a escala internacional, y podrán participar directores menores a 35 años. Un comité revisará todas las solicitudes para seleccionar a quienes tendrán la oportunidad de trabajar con la Ofunam, agrupación que, según el punto de vista artístico, desde hace varios años ha crecido y está en un muy buen momento, destacó Fernando Saint Martin, director de música de la UNAM.
Una de las muchas cualidades que se buscarán en los participantes es que tengan conciencia musical, explicó Massimo Quarta, director de la Ofunam y presidente del jurado formado por el compositor y académico de la Universidad de las Artes de Helsinki, Atso Almila; el director musical de la Orquesta Filarmónica de Bogotá, Josep Caballé-Domenech; la directora francesa Claire Gibailt, y el actual director de la Orquesta Filarmónica de Boca del Río, Veracruz, Jorge Mester.
Un director nunca debe olvidar que él no toca, pero debe hacer todo lo posible para que los músicos toquen lo mejor que puedan. Una orquesta necesita un jefe musical, alguien que tenga democráticamente una idea de las obras, por tanto, sus ideas deben ser claras, añade Quarta.
El director de la Ofunam asegura que el jurado está abierto a las nuevas propuestas y estilos, siempre con la certeza de que “un buen director debería hacer que las cualidades de los solistas resaltaran, y no matarlas. Un director tiene una idea de cómo van a tocar los contrabajos, los cornos, la tuba o la flauta, con respeto para todos los músicos, quienes deben saber que el director tiene la responsabilidad de saber juntarlos a todos.
La importancia del ego
“No se necesita ser dictador, pero se debe tener una dosis muy exacta de ego, de lo contrario la orquesta mata al director en un par de minutos. Es una línea muy delgada la que separa ambas situaciones.
“Un director no debe hablar mucho, debe hacerlo con los ojos, con su presencia. No pedir: ‘mírame, mírame’, sino: ‘escuchen lo que pasa’. Para mí, la gestualidad es importante. Hay quienes hacen gestos muy grandes, o quienes no se mueven casi nada. Al final, uno puede tener el mejor gesto del mundo, pero si no hay ideas, ni conciencia de lo que se está diciendo, no hay sustancia.”
El Premio Internacional de Orquesta Ofunam se convocará cada dos años. Para participar los aspirantes deberán llenar un formulario antes del 27 de abril, disponible en la página de Internet: www.cultura.unam.mx/premiofunam, y enviar los documentos requeridos, además de un video de un concierto de orquesta dirigido por él en formato mp4 de máximo 3GB, que incluya fragmentos de una obra clásica (1770-1820), una romántica (1860-1900) y una pieza contemporánea (siglos XX y/o XXI). La cuota de inscripción al certamen es de 2 mil pesos para mexicanos y 150 dólares para extranjeros.
El jurado seleccionará un máximo de 12 candidatos para que participen en tres fases finales entre el 17 y el 23 de septiembre. A la última ronda llegarán tres participantes, que conducirán un ensayo general y un concierto, el cual incluirá obras de autores mexicanos.
Todas las rondas y el concierto de la etapa final del concurso estarán abiertas al público, e incluso se transmitirá vía streaming para que tenga más alcance.
El concurso permitirá revisar el estado de la dirección de orquesta a escala internacional; seguramente, nos llevaremos muchas sorpresas, en un espíritu de sana competencia entre directores con distintas técnicas y capacidades interpretativas que seguramente van a enamorar al público, concluyó Juan Ayala.