Aquel día de 1775 fue para el navegante peruano Juan Francisco de la Bodega y Quadra el inicio de una conquista frustrada.
El 16 de marzo de ese año, de la Bodega y Quadra partió del puerto de San Blas, México, en una goleta pequeña, con vigas rajadas y velas insuficientes con la orden de llegar a Alaska para detener a los rusos que habían entrado a través del Estrecho de Bering.
Eso y, al mismo tiempo, asegurar la presencia española en estos territorios.
Así fue como le dio su nombre a la isla que hoy conocemos como Vancouver. Hasta que las tropas británicas lo borraron de los mapas.
En Lima, el Museo Bodega y Quadra recuerda parte de las aventuras de este navegante peruano. Se espera que el museo reabra sus puertas en breve, tras seis meses de reparaciones.
El público podrá conocer los recorridos del explorador, nacido en 1744, desde que ingresó a la Real Compañía de Guardiamarina de Cádiz, en España, a los 19 años.
Bajo este servicio, Bodega se ofreció para trabajar en el puerto de San Blas, México, desde donde emprendió tres expediciones en nombre de la Corona de España.
En su primera expedición de marzo de 1775, Bodega partió bajo el mando de Bruno de Heceta.
Heceta tuvo que regresar a México a causa del escorbuto que afectaba a su tripulación.
Bodega siguió solo y escribió en su diario: "Debo cumplir con mi orden y honor, sacrificando mi salud y aún mi vida por Su Majestad... Morir cada uno en su ejercicio y por el Rey, es gloria para la posteridad".
No fue el primero
En ese viaje, Bodega recorrió la actual Bodega Bay, al norte de San Francisco, y los actuales estados de Oregón y Washington en Estados Unidos. Llegó hasta la isla de Vancouver, que los nativos llamaban Nutka, y a la actual bahía Bucareli, en el sur de Alaska.
Pero, aunque le dio su nombre, Bodega no fue el primero en llegar a la actual Vancouver.
Bodega y QuadraImage copyrightJorge Ortiz
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Mapa del siglo XVIII en el que la isla canadiense de Vancouver aparece con el nombre de Quadra y Vancouver
El pionero fue el español Juan Pérez, en 1774. Y el primero en poner pie en ella fue el marino inglés James Cook, en 1778, aunque la abandonó un mes después, con el experto en mapas y miembro de la Junta de Amigos del Archivo de British Columbia, Canadá.
Sin embargo, a partir de su expedición, Bodega elaboró una de las cartografías más completas de la costa oeste de Norte América. Gracias al navegante peruano se terminó de conocer este territorio, afirma Miguel Fhon, director del Museo a BBC Mundo.
Fue en su segundo viaje, en 1779, que Bodega tomó posesión para España de las costas de California, Oregón y Washington. También ocupó Alaska y la isla de Vancouver.
Conquista de 10 años
La conquista habría de durar una década.
Un día de 1789 la marina española detuvo a tres barcos británicos en Vancouver. Sus tripulantes aseguraban que James Cook había ganado esos territorios para Inglaterra unos años antes, narra el historiador marítimo Jorge Ortiz.
Para resolver el conflicto, Inglaterra designó al marino George Vancouver y España, a Bodega y Quadra.
Su misión era dividir la isla entre ambos países. Los enviados se hicieron amigos y bautizaron la isla con sus apellidos, Quadra y Vancouver, mientras avanzaban con la demarcación.
Pero Bodega se enfermó, regresó a San Blas en 1793 y murió en marzo de 1794, antes de definir los límites del territorio. Los ingleses se quedaron con la isla y fue conocida mundialmente sólo como Vancouver.
"Lastimosamente, Londres rechazó el uso de un apellido español en una carta inglesa. La desaparición de su nombre es trágica", dice Michael Leyland.
Pese a la antigua omisión, el experto en mapas asegura que British Columbia, región canadiense a la que pertenece Vancouver, "reconoce la importancia de Bodega como explorador, cartógrafo y colonizador".
Además de sus conquistas, los historiadores Manuel Morales y Patricia Herrera destacan el papel integrador del explorador entre Canadá, Estados Unidos, México, España.
"Bodega y Quadra fue un hombre universal", concluyen.
Fuente: www.bbc.com