Por primera vez, distintas generaciones de artistas morelenses provenientes de diversas escuelas se reúnen en una exposición con la finalidad de ofrecer un panorama del arte hecho en Cuernavaca, Morelos, en las últimas cuatro décadas.
Después del Edén. Arte en Cuernavaca 1974-2014 será inaugurada el jueves 12 de noviembre en La Tallera, para presentar pintura, dibujo, cerámica, video, fotografía, grabado, arte objeto y multidisciplina, de más de 50 autores.
El punto de partida de la exhibición es 1974, año de fallecimiento del pintor David Alfaro Siqueiros, quien fuera el creador del recinto sede de la muestra, y que coincide con el fin de la modernidad en México, pero también con una etapa de transformación de la llamada Ciudad de la eterna primavera.
“Más que una cronología es un planteamiento simbólico, porque es una etapa en la cual Cuernavaca también se transforma y a partir de este momento llegan varios artistas con quienes comienza una serie de temas recurrentes”, explicó la curadora Andrea Torreblanca.
Para establecer un diálogo con otra expresión que no fuera las artes visuales, la curadora tomó títulos del libro Las aves de este día, de la poeta morelense Kenia Cano, para definir los ejes temáticos de la exposición.
Así, el recorrido inicia con Al fondo del jardín en el que se aborda cómo este terreno se convierte en el refugio de muchos artistas a finales de los setenta, dando paso a paisajes idílicos.
En este apartado participa Magali Lara con una pintura que, de acuerdo con la artista, marca una etapa distinta en su relación con el color y la naturaleza para crear un lenguaje más pictórico, donde plasma el jardín interior que habita el cuerpo humano.
La plaza abierta tiene que ver con el vínculo con la ciudad, la fauna urbana y la forma en que los creadores empiezan a apropiarse de lo que sucede en la calle. Ejemplo de ello es el trabajo de Larisa Escobedo, quien exhibe parte de una serie fotográfica en la cual se observan esculturas de perros callejeros que deambulan por distintas zonas de Cuernavaca.
En Todas las lenguas se observan piezas de artistas que retoman elementos de la vida cotidiana y comenzaron a producir en la década de los ochenta del siglo pasado.
Es el caso de Pável Mora, quien presenta parte de su proyecto beneficiado con la beca del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (Fonca) titulado Paisajes construidos, en el cual mezcla imágenes de diferentes lugares para conectarlos como uno en grabados en placas de madera.
El resto de los apartados son No se llama ni se nombra, donde se muestra obra de creadores que experimentan con otros materiales para explorar y desprenderse de los tópicos habituales, y El sol no se mueve, en donde se da a conocer la manera como plasman paisajes alejados de las convenciones.
Entre los artistas participantes se encuentran Joy Laville, Cisco Jiménez, Antonio Russek, Rafael Uriegas, Vicente Gandía, Gerardo Suter y Reynel Ortiz.
Taiyana Pimentel, directora de La Tallera, destacó que a tres años de reabrir este espacio al público, era momento de entablar un diálogo con los creadores del estado de Morelos, en particular de Cuernavaca.
“La mejor forma de abrir el museo hacia la localidad es este tipo de exhibiciones que desarrollan estrategias no sólo para crear nuevos públicos, sino para que también los artistas se piensen a sí mismos”.
Acompañada de la secretaria de Cultura de Morelos, Cristina Faesler, la funcionaria adelantó que en colaboración con esta dependencia se editará un libro que acompañará a la exposición y además servirá para generar un primer acercamiento bibliográfico, crítico y literario de los artistas morelenses.
Fuente: www.conaculta.gob.mx