La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica formalizó ayer una denuncia por la pérdida del poeta
EFE. EXCÉLSIOR
La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) formalizó ayer una denuncia por la desaparición del poeta Federico García Lorca ante la jueza federal argentina María Servini, que, desde hace años, investiga violaciones de derechos humanos durante el franquismo.
Esta formalización se produce casi ocho meses después de que fuera anunciada su preparación, coincidiendo con el 79 aniversario del asesinato del poeta (19 de agosto de 1936) y el hallazgo de unos documentos que este colectivo había custodiado, informó el presidente de la ARMH, Emilio Silva.
La denuncia traslada a la jueza un relato que acredita “de manera fehaciente” las circunstancias de la detención y el asesinato de Federico García Lorca, a partir de un documento de la Jefatura Superior de Policía de Granada del 9 de julio de 1965.
El referido informe, que mostró por primera vez la versión oficial del régimen franquista sobre la muerte del poeta granadino, señala que García Lorca fue fusilado junto a otra persona y define al poeta como “socialista y masón”, a la vez que le atribuye “prácticas de homosexualismo, aberración que llegó a ser vox populi”.
El poeta se encontraba en Granada, España, en casa de unos amigos suyos, los hermanos Rosales Camacho, antiguos falangistas, donde fue detenido a finales de julio o comienzos de agosto de 1936 y trasladado a los calabozos del Gobierno Civil.
La denuncia relata que García Lorca fue sacado del Gobierno Civil “por fuerzas dependientes del mismo”.