Sayula, San Gabriel, Tuxcacuesco y Tonaya forman parte del circuito que busca difundir la figura del escritor
ADRIANA LUNA. EXCÉLSIOR
En la ruta se podrán visitar diversos museos dedicados al autor de Pédro Páramo
TUXCACUESCO, Jal.
Bajo la oscuridad nocturna, el pequeño Juan Rulfo (1917-1986) a los ocho años de edad observó a los peones de la hacienda cargando en hombros el cadáver de su padre, mientras con la otra mano mantenían en alto antorchas encendidas que recorrían el llano desde San Gabriel a su casa, el momento fue impactante en su vida. El dolor de la tragedia lo plasmó magistralmente en su obra El llano en llamas.
Al padre de Juan Rulfo lo mataron por una discusión sobre unas vacas y unos potreros. En la noche lo encuentran tirado sus peones en un cruce de caminos (le habían disparado por la espalda). Ellos toman órganos que son una especie de cactáceas, les prenden fuego como antorchas y traen cargando al padre de Rulfo, Nepomuseno Pérez (don Cheno). La familia lo ve venir desde San Gabriel y parece que el llano está incendiado. Él tenía ocho años, el impacto lo va a llevar hasta escribir Pedro Páramo, su personaje principal va a Comala a buscar a su padre. Rulfo tenía esa necesidad de encontrar a su padre, es freudiano. Una experiencia en su vida que marcó su carácter y su obra, su estética, su forma de ver el mundo real”, explicó el investigador Rodrigo Sánchez Sosa.
Los visitantes en su mente imaginan las escenas mientras observan en el paisaje de llano, desde lo que será uno de los miradores en la ruta cultural.
Severiano Rulfo, sobrino del escritor, recorrió con Excélsior los cuatro municipios que integran el universo rulfiano: Sayula, San Gabriel, Tuxcacuesco y Tonaya. Se confirmó el avance de las distintas obras que se construirán en la región como miradores, museos -uno subterráneo que se llamará El Páramo- y centros culturales.
Es evidente el entusiasmo de promotores de la ruta y población en general por mostrar los paisajes, la hacienda donde nació Rulfo, su acta de nacimiento, sus fotografías, la historia de los pueblos y la herencia cultural que dejó el escritor mexicano. Algunas de las fincas históricas coloniales e indígenas datan de los siglos XVI-XVII.
El presupuesto inicial para la primera ruta cultural Juan Rulfo es de 18 millones de pesos pero se espera llegar al menos a 21 millones para poder terminar el proyecto a tiempo para su centenario.
La bendición familiar
La familia Rulfo conoce el proyecto y han comenzado a participar, aunque pusieron condiciones básicas, que la primera Ruta Cultural de México beneficie a la población en general porque así lo habría querido Juan Rulfo. Falta aún oficializarlo.
Están reservados. Ellos lo que quieren es que sea un beneficio para la población, que no sea un tema político ni de gobierno, aunque está financiado el proyecto por los tres niveles de gobierno, pero ellos quieren que el beneficio vaya directamente a la población. Y es justamente lo que queremos dejar claro en todo momento, si ellos se suman es porque el potencial es mucho. Esta es una vitrina muy grande para que ellos también lo puedan aprovechar”, explicó la Coordinadora de la Ruta Cultural Juan Rulfo, Irma Salamanca.
Los Rulfo han protegido su nombre para evitar manoseo y manipulación con intereses mezquinos, el tema se tocó porque la ruta llevaría el nombre del escritor “al principio renuentes y tienen razón porque ha habido muchas situaciones en donde ellos se han visto involucrados y a veces se ha querido beneficiar a particulares. No fue fácil y fue reciente que ya pudimos llegar y tocarlos. El presidente de Tonaya, Librado Vizcaino nos ayudó muchísimo, incluso él es parte de la familia y nos ha ayudado mucho a sensibilizarlos, a que vean que no es un tema de un particular. Y ellos lo van a ver en poco tiempo, la estructura cultural es para la población”.
Durante el acercamiento con la familia también se abordó el tema del documental que realiza Juan Carlos Rulfo “se están pidiendo permisos y facilidades en los municipios”.
Todo el proyecto trabaja con la asesoría del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI).
El municipio de Tonaya acaba de adherirse al proyecto de la Ruta Cultural. Aproximadamente el 40% de la población se dedica a actividades de agricultura y ganadería.
Me siento orgulloso ser parte de la familia en la quinta generación. Más porque en esta ruta se va a apoyar a la economía en nuestra región. Tonaya es uno de los pueblos que no podía quedarse fuera de la ruta, se puede promover la cultura, la artesanía y se puede apoyar a muchas madres de familia que tienen necesidad y capacitándolas pueden salir adelante”, señaló a Excélsior, el alcalde de Tonaya, Librado Vizcaino.
Niñez abraza a Rulfo
En los últimos meses en las escuelas de San Gabriel y Tuxcacuesco se han regalado los libros de El llano en Llamas y se les leen los cuentos a los niños ahora ellos comienzan a ser los principales promotores rulfianos entre los visitantes.
En Tuxcacuesco está la dinámica de que un grupo de niños haga los recorridos turísticos. Muestran el museo, el acervo y te llevan a Apulco, a la hacienda donde se documentó que nació Juan Rulfo”.