Excélsior
LUIS CARLOS SÁNCHEZ
CIUDAD DE MÉXICO
México ha fallado en la enseñanza del estudio de las reglas y principios que gobiernan el uso de su lengua. “Ha sido error tras error, por ejemplo, considerar que la lengua es sólo un sistema de comunicación eficaz y pensar que el español se debe estudiar como una herramienta que está al servicio de las demás disciplinas, es un error fundamental”, afirma la doctora en lingüística de El Colegio de México, Irma Munguía Zatarain.
La investigadora, quien publica Gramática de la lengua española: clases de palabras (Gedisa/UAM Iztapalapa, 2016) advierte que la ausencia del estudio de la gramática en la enseñanza del país ha frustrado que los estudiantes mexicanos accedan a comprender las estructuras del funcionamiento de la inteligencia.
“Se ha perdido la oportunidad de que los estudiantes se acerquen al estudio de la gramática de su lengua, lo cual les permitiría conocer un poco más cómo funciona el cerebro, la inteligencia humana, los lenguajes son sistemas que están muy relacionados con sistemas abstractos y con estructuras cognoscitivas, de la manera cómo funciona la inteligencia”, dijo.
Munguía Zatarain publicó en 2014 una investigación auspiciada por la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior, (ANUIES) en la que documentó que fue a partir de principios de la década de los setenta cuando la gramática se hizo de lado. Posteriormente, en la reforma educativa de 1993, “decidieron que había que eliminar los últimos temas que quedaban de gramática porque estaba en boga en ese momento el método comunicativo funcional que recomienda que los niños aprendan haciendo, es decir, que aprendan a escribir escribiendo y a leer, leyendo”.
Para la especialista, la decisión fue un error. De estudiar gramática, señala, “nuestros alumnos saldrían con un sustento teórico que les iba a permitir manejar con mayor dominio su lengua, por eso no escriben bien, la gramática no sirve para escribir bien de inmediato, pero sirve de manera indirecta”. En su libro, la también maestra por la UNAM, propone una manera diferente de acercarse a la disciplina.
La propuesta implica conocer las “nuevas descripciones y clasificaciones” de las palabras, así como una explicación del funcionamiento de las diferentes categorías gramaticales que se emplean en el español, incluyendo sus propiedades morfológicas y sintácticas. “El libro puede utilizarse como texto de auto instrucción debido a que, al final del volumen, contiene las respuestas a los ejercicios, lo que le permite al lector comparar y corregir sus prácticas”.