Miguel Lira y Ortega, nació en la ciudad de Tlaxcala el 12 de abril de 1827 y falleció en la ciudad de Puebla el 27 de mayo de 1882.
Participo en la política de su estado natal, promovió leyes y decretos en favor del pueblo tlaxcalteca. Fue considerado como uno de los principales asesores del primer Congreso Constituyente del Estado, en 1857. Pocos años después destacó en el campo de batalla, lo que le mereció los rangos de Teniente Coronel primero y Coronel después. Como secretario General de Gobierno estableció la existencia de juntas directivas de educación primaria, para hacer frente al problema educativo, ya que más de la mitad de la población del Estado no sabía leer ni escribir.
Promovió también la Ley de Elecciones de Ayuntamientos, con el fin de que los ciudadanos participaran en las decisiones del Ayuntamiento, pero sobre todo, promovió la Primera Constitución Política Local, con lo cual Tlaxcala sería considerada como Estado. Fue gobernador del Estado dos veces. Se oponía con fuerza a la reelección, es decir, no aceptaba que una persona pudiera ser gobernante por dos periodos. Sin embargo, su destacada labor hizo que el pueblo lo eligiera nuevamente. Llegó entonces por segunda vez a la gubernatura, en 1877. Pero cuando se dio cuenta de que algunos grupos políticos pretendían que se autorizaran las reelecciones de presidentes y gobernadores, Miguel Lira y Ortega presentó su renuncia al cargo, en 1879.
Más datos de su vida
Consumada la independencia de nuestro suelo, la antigua ciudad de Tlaxcala era la que resentía más que ninguna otra del continente nacional, los estragos de una guerra sin cuartel que durante once años se sostuvo entre insurgentes y gachupines, para que México pudiera reconquistar sus derechos perdidos, y su soberanía fuera reconocida, no sólo por las cortes de Europa, sino por las potencias más poderosas de todo el mundo.
En esta situación, de la opulenta Tlaxcala de más de doscientos mil habitantes de los tiempos de Xicotencatl, no quedaban más que unas cuantas casas destruidas por las inundaciones, aniquiladas por las balas del cañón, y otras cuántas familias que las habitaban sin más recursos para sostenerse que su corporal trabajo en una población sin comercio ni industria conocida, porque la de las mantas había acabado.
Entre estas familias había un matrimonio compuesto de D. Santiago Lira y Doña María Ignacia Ortega, matrimonio que se distinguía por su moralidad y buenas costumbres y de nada dudosos antecedentes, puesto que D. Santiago Lira, hijo de D. Diego José de Lira que fue dos veces gobernador de la entonces provincia de Tlaxcala, hacía remontar su descendencia hasta el trono de Xicotencatl, según el árbol genealógico que existe en el pueblo de Axotla del Monte; y doña Ignacia Ortega la hacía remontar por tradición familiar hasta la familia del Señor Arzobispo Ortega y Montañéz que desempeñó por algunos días el virreinato en tiempo de la dominación castellana.
(*) Publicado en "La Semana Política", periódico Independiente, Político y Literario; No. 62; Ciudad de México, Viernes 1º de Noviembre de 1889; Tomo I; página 518. (se respeta ortografía original)
Fuente: Revista Quórum, presencia e imagen con ideas, Tlaxcala-México, Año IV, No. 44, Mayo 2013
Miguel Tiburcio Valeriano de Lira y Ortega.De ideas liberales y con la habilidad para guiar a masas, Manuel María de Llano Lozano fue un político separatista que gobernó Nuevo León en cuatro ocasiones,
Nació el 12 de abril de 1827. Tlaxcala, México. De ideas liberales y con la habilidad para guiar a masas, político promovió leyes y decretos en favor del pueblo tlaxcalteca.
Fue considerado como uno de los principales asesores del primer Congreso Constituyente del Estado, en 1857. Pocos años después destacó como gran hombre de lucha en el campo de batalla, lo que le mereció los rangos de Teniente Coronel primero y Coronel después. Como secretario General de Gobierno estableció la existencia de juntas directivas de educación primaria, para hacer frente al problema educativo, ya que más de la mitad de la población del Estado no sabía leer ni escribir.
Promovió también la Ley de Elecciones de Ayuntamientos, con el fin de que los ciudadanos participaran en las decisiones del Ayuntamiento, pero sobre todo, promovió la Primera Constitución Política Local, con lo cual Tlaxcala sería considerada como Estado.
Gobernador
Fue gobernador del Estado dos veces. Se oponía con fuerza a la reelección, es decir, no aceptaba que una persona pudiera ser gobernante por dos periodos. Sin embargo, su destacada labor hizo que el pueblo lo eligiera nuevamente. Llegó entonces por segunda vez a la gubernatura, en 1877. Pero cuando se dio cuenta de que algunos grupos políticos pretendían que se autorizaran las reelecciones de presidentes y gobernadores, Miguel Lira y Ortega presentó su renuncia al cargo, en 1879.