Carlos Paul |
Iván León, Juan Mario Pérez, Enrique Rivas e Ignacio de la Garza, presentan la tercera edición del Diccionario del Náhuatl en el espanol de México, en el marco de la 39 FIL del Palacio de Mineria. Foto Roberto García Ortiz
Ciudad de México. La tercera edición, corregida y aumentada del Diccionario del náhuatl en el español de México, coordinado por Carlos Montemayor, en el que participaron para su contenido Enrique García Escamilla, Enrique Rivas Paniagua y Librado Silva Galeana; fue presentada el viernes en el marco de la 39 Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería.
Editado por la Universidad Nacional Autónoma de México, se trata de un diccionario que recoge más de 2 mil 600 nahuatlismos vigentes en el habla de varias regiones del país, no sólo de la Ciudad de México, mil toponimias, 232 voces relacionadas con la herbolaria, la flora y la fauna; 498 frases y refranes derivados de 148 voces de origen náhuatl, 105 nombres personales en ese idioma, 138 figuras poéticas del náhuatl clásico y una sección de “análisis de nahuatlismos polémicos”.
Durante la presentación a cargo del historiador Ignacio de la Garza, el activista lingüístico y traductor Iván León Javier y el promotor cultural Juan Mario Pérez, se destacó la labor de Montemayor para la realización del diccionario, con cuya tercera edición conmemorativa se rinde homenaje por el 70 aniversario del natalicio del también poeta, literato, activista e historiador que lo coordinó.
La nueva edición, corregida y aumentada, comentó el historiador, nos hace ver cuán viva está esa lengua y esa cultura, “no como algo folclórico o anecdótico, sino como algo en transformación, en movimiento, en resistencia y evolución”.
Por su parte, Iván León Javier destacó que se trata de un diccionario “que como hablante y traductor me ha sido muy útil. Lo es de igual manera para aquellos que no hablan el idioma o quieren aprenderlo”.
Como traductor, dijo, “hago distintos trabajos del español al náhuatl; y me he remitido a este diccionario para averiguar y desmenuzar el sentido de ciertas palabras, hurgando en sus raíces y morfemas, lo cual me ha ayudado mucho”.
Uno se da cuenta, añadió León Javier, que con el tiempo algunas palabras van perdiendo su uso. El contacto de lenguas a ocurrido a lo largo de toda la historia de la humanidad, las lenguas se dinamizan, se enriquecen por contacto. Hoy una lengua que no se reactualiza, que no se reconceptualiza va hacia su extinción”.
Con esta tercera edición, dijo Juan Mario Pérez, “se está llegando a unos 105 mil ejemplares impresos y se está trabajando para que se pueda encontrar en formato digital”.