A decir de antropólogos e historiadores, en la cultura mexica los individuos llevaban una dieta que se componía principalmente de tortillas, atole, tamales, frijoles, granos de amaranto y cacao; de acuerdo a sus actividades era el número de comidas que realizaban, de manera que mujeres y niños ingerían dos alimentos al día, en tanto que los hombres que trabajaban lo hacían tres veces.
Sin embargo, en la actualidad las costumbres y necesidades cambiaron y lo recomendable es que los individuos realicen mínimo tres comidas, y preferentemente dos colaciones (pequeñas porciones de alimentos).
Al respecto, la nutrióloga y psicoterapeuta Luisa Maya Funes, adscrita al Hospital Ángeles Lomas (en la Ciudad de México), explicó que es importante que todas las personas, sobretodo quienes viven con diabetes, no omitan ningún alimento, ya que esto podría tener consecuencias como la hipoglucemia (bajos niveles de azúcar en sangre).
"El cuerpo transforma los alimentos en energía necesaria para su funcionamiento; si las personas dejan de comer las células quedan sin ésta, lo que puede producir una sensación de cansancio y debilidad", detalló la licenciada Maya Funes.
Quienes padecen diabetes deben respetar los horarios de las comidas (procurando que éstas se realicen a la misma hora) y no omitir ninguna de ellas, además de ingerir alimentos de manera equilibrada (proteínas, grasas y carbohidratos), vigilar el consumo de hidratos de carbono (provenientes de azucares y harinas), ya que elevan los niveles de glucosa en sangre, poniendo en riesgo a la persona con diabetes.
Una alimentación adecuada consta de desayuno, comida y cena, además entre cada una puede tomarse una colación de fruta, yogurt light, galleta sin azúcar o integral, nueces (que tienen poco aporte de hidratos de carbono que pueden elevar el azúcar en sangre) por mencionar algunos, lo que ayudará a sentir saciedad y a no dejar desnutridas a las células del cuerpo.
Algunas recomendaciones para los pacientes con diabetes son "evitar dulces y caramelos, no dejar de comer por más de seis horas (preferentemente cinco alimentos al día), cuidar la cantidad de carbohidratos que se consume, ingerir poca grasa y evitar el consumo de alcohol", detalló la nutrióloga Luisa Maya.
Una reacción común del cuerpo cuando las personas no ingieren alimentos es que los niveles de azúcar en sangre se ven afectados, produciendo bajas concentraciones de la misma, lo que puede causar severos problemas como fatiga, cansancio, desmayos y hasta inconciencia.
Además, el cuerpo almacena energía que no se utiliza, y una vez que termina el ayuno, éste acumula una mayor cantidad de calorías en forma de grasa, lo que puede provocar obesidad.
Es necesario que el paciente con diabetes no deje de inyectarse la insulina o tomar los fármacos que el medico prescribió, a menos que éste así lo indique. Será necesario, según las recomendaciones del doctor, tomar alimentos antes o después de suministrar o ingerir algún medicamento.
Cabe mencionar que una dieta balanceada y seguir las recomendaciones del médico o nutriólogo evitará tener complicaciones en el control de la diabetes.
Fuente:www.jornada.unam.mx