El humorista gráfico argentino, Joaquín Salvador Lavado Tejón, más conocido como Quino, creador de la tira cómica Mafalda, fue galardonado hoy con el Premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades 2014. El rector de la UNAM, José Narro Robles, fue parte del jurado.
Quino fue galardonado por unos "lúcidos mensajes" transmitidos principalmente a través de Mafalda, el mismo año en que se celebra el 50 aniversario de la creación de esta historieta, traducida a más de 30 idiomas y llevada al cine y la televisión.
"Al cumplirse el 50 aniversario del nacimiento de Mafalda, los lúcidos mensajes de Quino siguen vigentes por haber combinado con sabiduría la simplicidad en el trazo del dibujo con la profundidad de su pensamiento", afirmó el jurado en el acta de concesión del premio.
Mafalda, cuya primera historieta se publicó el 29 de septiembre de 1964 en el semanario Primera Plana de Buenos Aires, es la "principal protagonista del trabajo creativo" de este dibujante, recordó el jurado.
Esa niña "inteligente, irónica, inconformista, contestataria y sensible" dio fama internacional a Quino, cuya obra "conlleva un enorme valor educativo y ha sido traducida a numerosos idiomas, lo que revela su dimensión universal", destacó el director del Instituto Cervantes y presidente del jurado, Víctor García de la Concha, al anunciar hoy la concesión del premio.
Optaban a este galardón, cuyo fallo se dio en el Hotel Reconquista de Oviedo, el periodista mexicano Jacobo Zabludovsky, los fundadores de Skype, el programa de mensajes instantáneos de texto, voz y video, el filósofo español Emilio Lledó, la agencia Magnum de fotografía, las periodistas Caddy Adzuba y Cristiane Amanpour. En total había registradas 22 candidaturas de 14 países.
El año pasado, la fotógrafa estadounidense Annie Leibovitz fue la elegida por el jurado.
Joaquín Salvador Lavado es el tercero de los ocho Premios Príncipe de Asturias que se repartirán este año, y se une a los nombres del arquitecto estadunidense Frank Gehry y el historiador francés Joseph Pérez, galardonados con los premios de las Artes y de las Ciencias, respectivamente.
Cada uno de los Premios Príncipe de Asturias, concedidos por primera vez en 1981, está dotado con 50 mil euros y una escultura de Joan Miró, símbolo representativo del galardón.
La entrega de premios tendrá lugar en otoño boreal en una ceremonia en el Teatro Campoamor de Oviedo.
- Una heroína iracunda -
Joaquín Lavado descubrió su vocación por el dibujo de la mano de su tío Joaquín Tejón y, aunque comenzó estudios de Bellas Artes en su ciudad natal de Mendoza, los abandonó en 1949 dispuesto a "dedicarse a las historietas y al humor".
En 1954 publicó su primera página, pero la fama le llegaría diez años después con la creación de Mafalda, que dibujó inicialmente para una campaña de publicidad que finalmente no se llevaría a cabo.
Las tiras de Mafalda, una fan de los Beatles y enemiga acérrima de la sopa, pasan a publicarse en 1965 en el diario El Mundo, momento en que comenzará su expansión, primero por Sudamérica y luego el resto del mundo, llegando a Europa en 1969 de la mano del escritor y semiólogo italiano Umberto Eco, que la califica de "heroína iracunda".
La fama y el interés de Mafalda ha trascendido incluso su "muerte", ya que sus libros sigue reimprimiéndose, ha tomado la forma de dibujos animados e incluso se ha adaptado a las nuevas tecnologías, pese a que Quino dejó de dibujarla en 1973.
Quino tomó esa decisión, según se afirma en su página web oficial, porque "ya no siente la necesidad de utilizar la estructura expresiva de las tiras en secuencia", aunque aceptó seguir dibujándola en ocasiones especiales para campañas de organismos como UNICEF.
- Humor más ácido y negro -
"Desde que dejó de dibujar a Mafalda, Quino se entregó a un humor más ácido y negro, destinado en mayor medida a un público adulto y que ha ido recopilando en su colección de libros de humor", afirmó la Fundación Príncipe de Asturias, que concede los premios, en un comunicado.
Entre estas obras figuran libros como "¿Quién anda ahí?", en el que reflexiona sobre los miedos actuales a través de dibujos publicados en medios, algunos inéditos y algunos de los pocos hechos en color.
El galardón se une a los muchos que ya tiene Quino el premio Iberoamericano de Humor Gráfico Quevedos o el Romics de Oro, máximo galardón que otorga el Festival de Cómic y Animación de Roma, entre otros.
El premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades es el tercer galardón de los ocho que se otorgan anualmente, tras la concesión al hispanista francés Joseph Pérez del de Ciencias Sociales y al arquitecto estadounidense Frank Gehry del de las Artes.
El pasado año, el premio de Comunicación y Humanidades fue para la fotógrafa norteamericana Annie Leibovitz.
Los premios Príncipe de Asturias se entregarán en otoño en una ceremonia, presidida por el heredero de la Corona española, el príncipe Felipe, cuyo título da nombre a los galardones, en el teatro Campoamor de Oviedo.
Hijo de andaluces emigrados a Argentina en 1919, Quino adoptó la nacionalidad española en 1990 y alterna su residencia entre Madrid y Buenos Aires.
Reconocido como uno de los más destacados humoristas gráficos internacionales, Quino alcanzó la fama con las tiras de Mafalda, un personaje nacido para una campaña publicitaria frustrada que empezó a publicarse en 1964 en el semanario Primera Plana, de la capital argentina.
En esa serie, Quino reflejó el mundo de los adultos visto desde los ojos de un grupo de niños en el que la protagonista era una niña preguntona, inteligente, irónica, inconformista, preocupada por la paz y los derechos humanos, que odia la sopa y ama a los Beatles.
Las historias de este personaje contestatario, que llegó a Europa en 1969 de la mano del Premio Príncipe de Asturias Umberto Eco, que la definió como una "heroína iracunda", se han publicado en diarios y revistas de todo el mundo.
En 1973, Quino dejó de dibujarla, aunque el interés por Mafalda ha seguido vigente hasta la actualidad, con sus libros reimprimiéndose y adaptándose a las nuevas tecnologías, disponibles en formato digital.
Tras esa etapa, Quino se entregó a un humor más ácido y negro, destinado en mayor medida a un público adulto y que ha ido recopilando en su colección de libros de humor.
Entre los más recientes se encuentran "¡Qué presente impresentable!" (2005), "La aventura de comer" (2007) y "¿Quién anda ahí?" (2013).
Fuente:www.milenio.com