Por Juan Carlos G. Partida, corresponsal. Guadalajara, Jal. La Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara fue abierta esta mañana con la entrega del premio FIL en lenguas romance al español, o “barcelonés” como prefiere definirse, Enrique Vila-Matas, quien en su discurso hizo una recreación autobiográfica que se detiene en los recientes atentados y bombardeos entre los países europeos y el Estado Islámico.
“Mi biografía va desde el nacimiento del rocanrol a los atentados en París”, dijo Vila-Matas, vestido con un sencillo blazer oscuro y calzando unos tenis Nike guindas, rodeado de gobernadores, el secretario de Cultura inglés -país invitado de honor- y el presidente del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, Rafael Tovar y de Teresa.
Afirmó que en 1948, año de su nacimiento, cinco músicos de Baltimore transmitieron a través de Radio Maryland, en Estados Unidos, la primera canción de rocanrol de la historia, It’stoosoontoknow (Demasiado pronto para saberlo), que inauguró algo nuevo y se extendió rápidamente primero por la costa este del país norteamericano y después por el mundo entero.
Concluyó que tan futurista fue escuchar por vez primera esa canción para quienes tuvieron la oportunidad, como ahora escuchar el coro de Voces de Chernobyl, la novela testimonial de la reciente ganadora del Nóbel, Svetlana Aleksiévich.
“¿Qué significa entrar al futuro hoy en 2015?”, se preguntó recordando la confrontación entre el extremismo musulmán y las naciones occidentales. “Me van a perdonar pero lo que dicen las Voces de Chernobyl es el futuro”.
En el acto inaugural estuvo presente Fernando del Paso, quien el año próximo recibirá el Premio Cervantes, de quien Vila-Matas afirmó en posterior entrevista con los medios que debieron entregar ese galardón al escritor mexicano por lo menos 30 años atrás.
También estuvieron presentes delegados de Reino Unido, país invitado de honor en esta edición, quienes posteriormente inauguraron un impresionante pabellón laberíntico y con un foro que será sede principal de decenas de presentaciones de libros programadas. La Jornada